El trabajo no se basa en la intervención directa del espacio, en cambio se trata de un ejercicio imaginativo donde las personas toman una foto de una calle “que conocen y odian” y luego mediante herramientas como Photoshop o GIMP darles un nuevo aspecto mencionando los cambios realizados.
Un interesante proyecto desde mi punto de vista, ayudaría a la planeación de la recuperación de espacios invadidos o maltrechos para convertirlos de nuevo en lugares para todos.
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