El diseño en la vida diaria nos proporciona una gran cantidad de satisfacciones pasadas desapercibidas; el uso de los objetos que nos encontramos todos los días a toda hora, depende en gran parte del diseño que este tenga, además de su contexto y ocasión de uso, cada objeto ocupa un lugar en el espacio y en el tiempo y este espacio y este tiempo son modificados por el objeto, siendo un poco atrevidos podemos decir que en cierta forma el espacio es también un objeto en la medida en la que interactúa con el usuario, pero tampoco vamos a llegar al extremo de decir que la totalidad de las cosas son objetos por el hecho de tener un contacto con el humano, aquí es donde podemos trazar esa línea limite en lo que es y no es un objeto.
Los objetos deben ir acompañados de un uso para ser considerados como tales, estos usos pueden variar sus formas en cuanto al fin de la acción o a la misma cultura en la que están inscritos, ¿pero quienes son los que dan uso a los objetos?, Las personas obviamente, y hay es donde el diseño juega un papel importante en esta historia. El diseño por así decirlo es el encargado de listar detalladamente la forma como una persona satisface una necesidad x mediante al uso que le da a un objeto y, y es tarea del diseñador el procurar una respuesta que lo haga de la mejor manera posible, de lo contrario nuestra experiencia del día a día seria totalmente frustrante.
Pongamos un ejemplo para tratar de aclarar el panorama, platearemos una situación cotidiana con todo lo que ello implica:
Pepito Pérez es un sujeto común, con un trabajo común, con una vida rutinaria, él se levanta por las mañanas a bañarse y vestirse para salir a su oficina. Cuando ya se encuentra en su lugar de trabajo se le encomienda a Pepito llenar una encuesta cualquiera sobre su trabajo, y el lo hace no muy gustoso.
Pepito necesita de un lápiz para llenar la encuesta que esta impresa en un papel bond de resma cualquiera, pero ¿Cómo sabe él lo que necesita para hacer lo que le dijeron?, la respuesta es sencilla: en base a la experiencia, pero ¿quien le dijo por primera vez a Pepito como llenar la encuesta, como utilizar el lápiz?, cuando el era pequeño su mamá le guiaba la mano para que agarrara el lápiz y rayara sobre una hoja de papel, una de esas veces tomo el lápiz al revés (por el lado de la goma) y no pudo escribir, puede ser que en ese momento descubrió que lo que escribía se podía borrar con el mismo instrumento, y de hay en adelante Pepito hizo uso de esa experiencia para evaluar situaciones en el futuro, cada vez que se encontraba con un elemento de morfología similar a la de un lápiz, buscaba en su record de experiencias la forma en la cual uso estos elementos de forma que satisficieran su necesidad de escribir.
Hasta aquí la primera parte, para no hacer de esto un ladrillo aburridísimo continuaremos con Pepito en el siguiente post.
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