X Salón de Diseño (reseña)

Este 17 de septiembre fue la inauguración de X Salón de Diseño Industrial en conjunto con el XVII salón de Diseño Grafico en la UN, el evento inicio cerca de las 6 de la tarde en el museo de Arquitectura Leopoldo Rother.

Bastante gente en el primer día, el primer piso del museo reventaba de gente que escuchaba las palabras inaugurales del evento; intervenciones de los estudiantes, profesores y directores de las escuelas. En los discursos emotivos todos dejaban ver el gran esfuerzo y los grandes obstáculos que tuvieron que pasar el equipo de trabajo del Salón.

Después de esas palabras de bienvenida se nos invito al tercer piso con una bebida fría y después a ver la muestra. Ambas escuelas realizaron un esfuerzo en encontrar los mejores proyectos del último año para ser expuestos.

El tercer piso del museo guardaba los proyectos de diseño industrial de profesores, egresados e invitados varios, interesantes todos, mostrando el nivel buscado dentro de las aulas.

El segundo piso del Leopoldo Rother contiene lo proyectos de pregrado de ambas escuelas (Industrial y Grafico) que fueron seleccionados mediante convocatorias en las semanas anteriores. Muchas cosas rescatables pocos, mejor dicho ningún punto negativo, evidenciando el esfuerzo en curaduria, modelos de buena presentación y planchas que contenían la información necesaria de los proyectos.

El fin del Salón es mostrar fuera de las aulas los resultados de los ejercicios de proyección hechos por nosotros, es una verdadera lastima que este evento se haya encontrado con gente que resulto un verdadero obstáculo para sacarlo adelante, en especial alguno que otro profesor saco sus trapos sucios al sol con tal de frenar la actividad, actos de envidia de estas personas que solo lograron dejar ver su lado mas desagradable, al fin de cuentas todos somos diseño todos somos colegas.

Pero aparte de lo malo que fue realmente poco, el Salón de Diseño sorprendió a muchos “era mas de lo que me esperaba” decían unos y otros (como yo) se regosigaban en el primer salón que veían.